No envolver a los BEBES hasta los pies.
Las posiciones o posturas forzadas con las piernas estiradas (extensión) y juntas (aducción) durante muchas horas al día pueden inducir a la Displasia del desarrollo de caderas.
Dejarlos libres para su desarrollo adecuado
En los bebes recién nacidos y lactantes pequeños, la posición natural (fisiológica) en el útero materno es con las piernas dobladas hacia el torso del bebe (caderas en flexión y abducción), él bebe no está preparado, desde el punto de vista del desarrollo, para una transición repentina, de flexión de las caderas a extensión.
Poder abrir las piernas (abducción) es un parámetro adecuado para diagnosticar el buen desarrollo de las caderas.
La limitación de no poder abrir las piernas es indicador de una posible displasia del desarrollo de las caderas.
El CARGARLOS ADECUADAMENTE AYUDA a prevenir la displasia de cadera
El cargarlos con la postura adecuada ayuda al adecuado desarrollo de las caderas de los bebés.
El porteo ergonómico respeta la postura fisiológica del recién nacido, con la espalda en forma de “C” y las piernas en “M”. En esta posición se favorece el correcto desarrollo de la columna vertebral del bebé y además la articulación de la cadera se encuentra más estable.
POR SUPUESTO, NO REEMPLAZA EL TRATAMIENTO MÉDICO EN CASO DE NECESITARLO.
NO DEBEMOS CARGARLOS DE ESTA FORMA
En esta posición sus miembros inferiores están parados y las piernas se encuentran apretadas lo que genera un posición forzada e inadecuada para el desarrollo del bebé.
Podemos cargarlos de la forma adecuada desde el momento de su nacimiento inicialmente con fulares que son cargadores de tela suaves y que se adaptan muy bien al bebe, posteriormente se pueden usar otros cargadores más resistentes de acuerdo al peso del bebe y que se gradúan de acuerdo a su tamaño.
Esta es la posición M o de ranita.
Una posición óptima para el desarrollo de la articulación de la cadera. Esta M es visible cuando las rodillas del bebé están más altas que su trasero, separando las piernas en un ángulo de 90°, está sentado en una posición saludable que no causa problemas de cadera y pierna, como la displasia de cadera.